27 de mayo de 2012

Reflexiones III

Esta no es una entrada de poesía, ni de sentimientos, tampoco espero con esta entrada saltar a la fama, tampoco es que lo espere con otras, simplemente utilizando el objetivo de mi blog, que no es más que escribir, escribir sea lo que sea, ya me conocéis y sabéis que es típico que un día de repente escriba lo harta que estoy, o que no puedo más y días después haga una exaltación a mi fuerza, me mime con palabras fuertes, y eso, no es más que el fruto de tener a las personas que tengo a mi lado.
Si algo me hace diferente a los demás, es mi alma, y es que a veces no me entiendo ni yo misma ¿cómo me van a entender los demás? ¿Os ha pasado alguna vez, que vosotros que medianamente sabéis escribir, no encontréis las palabras? Tan pronto quiero tirar la toalla, marcharme lejos, muchas veces pensé en dejar mi vida a un lado, y volar, solo volar, piensas que nada te ata a la tierra, piensas demasiado. Mi alma siempre ha tenido una obsesión por volar, por el cielo, ¿Qué alma de diez años piensa en la muerte? Y a la vez, veo, oigo o siento algo que me hace explotar, que hace que me aferre a la vida como nunca lo hecho antes.
A lo largo de mi vida, he tenido muchos motivos por los que luchar, tantos como para dejar de hacerlo. No soy ninguna víctima, tampoco llevo capa de heroína. Soy Casandra, una chica de casi 20 que mal o bien va sobreviviendo en una jungla de cristal. No espero que los demás entiendan o comprendan mi vida, o por qué soy así, me rijo por unas directrices. A veces fallo, la mayoría de las veces, otras gano la batalla, cuando el tiempo me empuja a conseguir. He querido forzar a mi alma a ser feliz, he querido amar lo que era un trozo de basura. He matado a mi corazón, le he puesto cadenas a mi alma, he querido ser normal, como todos. Hasta un día te levantas y descubres que no tienes porque ser lo que esperan que seas, qué un día te levantas y quieres comerte el mundo poco a poco, que no te importa que las heridas no estén cerradas, porque no es cosa tuya. Un día decides dejarte de lamentarte por ser diferente y empiezas a dar caprichos a tu alma, empiezas a dar alas a tu corazón. Escuchando cada vez más lejos las voces que juzgan. Un día de pronto decides dejar de llorar...Soy como soy, el mundo no me pido opinión para ser como es, así que yo he aprendido a no pedirle opinión al mundo para elegir mi camino.
Creces, maduras, te caes y vuelves a levantar. Te rodeas de muchas personas durante este camino, y te seguirás rodeando hasta el día que, eches a volar definitivamente...Es tu trabajo distinguir quien está a tu lado para ayudarte a levantar o quien quiere verte caer. Es tu trabajo dar todo de ti mismo, decepcionarte o encontrar a tu ángel de la guarda.

¿Crees en las hadas? ¿Crees en los fantasmas? ¿y en los ángeles de la guarda? Yo si, creo en las personas que sin esperar nada a cambio dan todo por ti, por verte sonreír, esas personas por las que darías la vida.

Tengo mucho camino aún por recorrer, mucha vida por la que resbalar, mucha noche por la que vagar...
Pero tengo que confesar que desde que ÉL está a mi lado, todo es más sencillo.
Apareció en mi vida, y empezó a protegerme, hasta de lo que más daño me ha hecho durante todos estos años, y no es otra cosa que yo misma. Deje de lado los versos en los que mártir del amor sucio había sido hasta ahora, y escribí los versos más puros que pudo escribir poeta de corazón inmaculado...
No pretendo arrepentirme de todo eso que creí sentir, pero ahora se que es el amor. Se lo que es volar estando viva porque antes he muerto respirando.

Tengo tantos y tantos sueños, mi vida, después de 20 toma un rumbo, siendo fiel a mi misma ya no son esbozos de una loca con la cabeza recostada en la espuma de una cerveza, si no de un proyecto de mujer.
Algunos sueños son una locura, y lejos de lograrlos, al menos lucharé por ellos.
Otros son sueños que durante mis años había estado muertos y marchitos, y el amor de mi ángel ha despertado en mi instintos tan puros y viejos como la humanidad. Otros sueños son monótonos, pero es que a su lado, no temo a la rutina. ¡Ojala tenga la rutina de besar sus labios por el resto de mis días!

Es así, un día te levantas y te das cuenta de que tu vida está cambiado, que ha cambiado y debes vestirte de gala para estreno de tu nueva sonrisa...Un día te levantas y descubres que ser diferente es lo mejor que te pudo pasar...Un día abres los ojos y decides no volver a llorar.

9 de mayo de 2012

Te quiero, héroe.

Te quiero a rabiar, te quiero tanto, tanto.
Te quiero en cuerpo y alma, te quiero para siempre.
Te quiero en lo bueno y en lo malo. Te quiero.
Aprendí a amarte, y prometo amarte toda la vida.
Te quiero a mi lado, en el lecho de mi cama,
y en el camino a la felicidad, de mi mano.
Te quiero pase lo que pase, siempre tuya seré-


Te quiero tanto así que daría mi alma por ti,
que vendería mi alma al mismo diablo por estar a tu lado.
Te quiero tal y como eres, 
con tus perfectos defectos, con tu halo del cielo.
Te quiero con aires de hombre, mi hombre.
Te quiero con ojos de niño, mi niño moreno.
Te quiero con la ternura de una niña,
con la pasión de mujer.
Te quiero porque viste en mi lo que nadie más vio.
Te quiero porque me siento amada, protegida y deseada.
Te quiero porque haces que me quiera.
Te quiero porque siento amor en tu mirar.
Te quiero cuando me desnudas por caricias.
Te quiero porque te pienso y hablo poesía.
Te quiero porque eres lo mejor que me pudo pasar.
Te quiero porque me salvaste del miedo,
rescate directo del dolor. 
Calmaste mi infierno, te quiero porque eres mi héroe.


Te quiero porque eres mucho más de lo que jamás pude desear.

8 de mayo de 2012

Madre, no hay más que una.

Cuando eres un bebe, piensas que tu madre lo sabe todo, que conoce todo.
Qué tiene la solución a todos tus problemas, que con una caricia y un "sana sanita, colita de rana" todas las heridas cerrarán. Creemos tocar el cielo en el balancear del columpio, y que mamá siempre estará allí para vernos. Cuando tienes un par de años, en el mejor de los casos, creces al lado de tu madre, aprender los colores, los números, las primeras rabietas en el cole. Pero el mundo se reduce a su sonrisa.
Cuando no mides más de medio metro, ella es santo de tu devoción, ella es la mejor de todas las mamás.
Crecemos, vienen épocas revoltosas, mamá deja de saber todo, y empezamos a conocer el mundo, pasamos de los diez años, creyéndonos independientes, pero cuando hay problemas, sabemos volver a los brazos de mamá, y aunque poco a poco vamos probando el mundo, nuestro mundo se reduce a sus brazos.
Con el tiempo, los años, mamá se mantiene en el margen, queremos que esté ajena a nuestra vida, comenzamos ese duele interno en el que no entendemos a nuestra madre, la vemos como un enemigo, y no como nuestro mejor amigo, es así, ley de vida. Poco a poco el mundo nos va haciendo heridas, más y más fuertes, y es cuando nuestra personalidad empieza a tomar rumbo, aunque aún quedan muchas caídas, muchas batallas, y en el mejor de los casos muchos errores, que nos hacen aprender, sufrir y llegar a ser lo que somos en un futuro... Unos somos mejores, otros somos peores, pero siempre seremos único y especial a los ojos de nuestra mamá. Para ella seguimos siendo su mundo, aunque nos empeñemos en mantenerla lejos...
Años después, pasamos al otro lado del puente, aunque sigue habiendo grandes encuentros, volvemos a los brazos de mamá, escuchamos, y entendemos muchas cosas...En el fondo, seguimos deseando que nos cante "sana sanita colita de rana" y que el dolor de los errores se calme, que nos abrace...
Es cuando nos damos cuenta de que madre, solo hay una.

Yo tengo a mi madre, es morena y tiene una sonrisa preciosa. Y si aún se puede, hoy la quiero un poco más. Durante mi vida, he tenido muchos momentos buenos, buenísimos, malos y malísimos a su lado.
Me he creído la reina del mundo, dándome de bruces con el suelo.
Me he creído independiente a su amor, necesitando de sus besos hasta para respirar.
Me he creído hija de la nada, cuando en realidad no podía ser más igual a ella.
Nunca he entendido muchas de sus formas, pero me gustasen o no, son por lo que soy lo que soy, y aunque me queda mucho que aprender, mucho que descubrir, sé que madre solo hay una, y yo amo a la mía.
No voy a volver a juzgar sus gritos, sus castigos, sus maneras, porque ella me dio la vida, y eso es lo más grande que una persona, que una mujer puede dar. Y por ello estaré agradecida toda mi vida.

Hoy, me ha abrazado, me ha dado besos en la cabeza, me ha dicho entre sollozos, lágrimas y suspiros que confía en mi, que sabe lo que siento, que no tire mi vida por la borda, me ha dicho llorando que soy lo que más quiere. Me ha cogido de las manos, me ha tocado todos mis dedos, se ha quedado en silencio, pero se que estaba recordando la primera vez que tocó mis manos en el hospital, y se me ha caído el alma a los pies. Os juro que me he sentido amada, que me he sentido su hija. Su primera hija.
Y me he arrepentido de todas las cosas feas que he podido decir, hacer, incluso pensar.
Y es cuando he comprendido que madre solo hay una...
Y es cuando he comprendido que la lucha de hace unos años por alejarme de ella, fue inútil rebeldía de niña, porque ahora estoy más unida a ella, que nunca.
Qué ambas hemos cometido errores, y las formas no han sido las mejores durante muchos años...

Y es que ojala todo el dolor, todos los errores, todas las heridas abiertas, se curasen con "sana sanita colita de rana que si no se cura hoy, se curara mañana" Y que madre, solo hay una.

1 de mayo de 2012

A lo largo de la vida...

Durante nuestra vida, las preferencias cambian al igual que cambiamos de gustos, manías y sueños. El que dijo que la vida era algo así como una montaña rusa, como una ruleta de la suerte, tenía más razón que cualquier otra comparación, y es que yo también soy de las que creen en el azar. Creo que todos caminamos hacía nuestras metas, con distintos pies de plomo, con distintos tonos de luz, y distintas filosofías. ¿Qués esperas de la vida?
A veces la vida, no es más que un teatro de luces y sonidos, otras tenemos en nuestras manos el poder de cambiar, de decidir, que se supone que es lo que queremos, pero a la hora de la verdad, ¿quien no tiene miedo de equivocarse?
El ser humano, ser inteligente, animal con sentimientos. Somos tan distintos que me parece una aberración intentar generalizar, ni siquiera clasificar por culturas... Cierto es podemos asemejarnos unos a otros por el seno donde hemos nacido, por el lugar donde hemos crecido...Pero hoy en día, el mundo es una ventana abierta, es un mar sin rincones...Otro error, creemos que lo conocemos y controlamos todo... Ese afán de superioridad del ser humano... Nunca me atrevería a atribuirle un adjetivo fijo a una persona... Mañana quizás ese violador, ese asesino se sienta la persona más desgraciada que hay sobre la faz de la tierra, quizás mañana ese cura santurrón se encuentre frente a frente al pecado y no sepa huir, cayendo en la tentación. 

Creo en las segundas oportunidades, creo que por encima de europeos, asiáticos... cristianos, musulmanes, de izquierdas o derechas, militares o pacifistas, por encima de salvajes o urbanos, de hombres y mujeres... Somos humanos, personas...Seres vivos...Y desde mi punto de vista, eso es algo que se nos olvida con mucha frecuencia. 

Creo que a lo largo de su vida una persona, puede tomar todos colores del arco iris, puedes caminar de puntillas, o arrastrarse, a lo largo de la larga o corta vida de una persona pueden suceder demasiadas cosas que hagan que su cabeza, su límite se extienda más allá de lo que él mismo creía. 

¿Quién nació siendo lo que es, lo que será? ¿Quien es la misma persona con 15, 25 o 45 años, incluso...quien es el mismo con 45 que con 80? La vida, los problemas, todo absolutamente todo se ve con ojos diferentes, dependiente directamente de la edad que tengas, y de las personas de las que te rodeas, es una proporción muy linda de la vida... "Dime con quién andas y te diré quien eres"

Cambiar, evolucionar, madurar...