12 de marzo de 2011

Esta noche.

¿A quien intento engañar? No, no soy fuerte. No puedo con todo, no soy feliz.
Hoy es una noche de esas, en las que ni el chocolate consigue borrar todos los recuerdos
que golpean mi corazón. Hoy, simplemente soy una escritora mediocre, sentada frente
a la pantalla del ordenador con 5 puñaladas demás, pero demasiado cobarde para olvidar.
Qué le vamos a hacer, se me olvido, esta noche luchar. Esta noche, no soy ningún super-héroe y me vence hasta un tema de examen, de un patético libro, de un curso que no es para mí.
Tengo rabia, tengo ira, por mis venas recorre el rencor, pero esta la tristeza ha invadido sin más mi cuarto, y se acuesta dando gemidos con la soledad. Esta noche se van de fiesta mis ganas de salir adelante, mis ganas de odiarle. Esta noche, soy un adolescente dolido, un chica infantil, un sensiblona dama del atardecer que no sabe desaparecer.
Prometí no volver a derramar una lágrima, ya no por él, por ellos, o por quien primero se llevo mi primera ilusión, pero esta noche me inundo en la miseria y me doy pena a mi misma.
No quiero ser pesimista pero, he perdido todo, no sé que cojones hacer con mi vida, me siento más que atada y sin ninguna motivación. Quiero gritar a todo el mundo, y ser mala, quiero pagar, quiero ser agresiva, desarrollar una mala conducta y que hablen de mí algo, pero a la vez soy patéticamente buena...¿A quien intento engañar? No estaba enamorada de Jorge, ni de Pedro, tampoco de Dani, ni mucho menos de Amador, y qué me dices del otro Pedro, o de Sergio...No, estaba enamorada, y estaré del amor. Porque no importa cuantas veces me hayan echo daño, ni cuantas veces me hayan utilizado... no, porque caeré, y volveré a sufrir, pero esta vez noto algo diferente, es como si Sergio se hubiera llevado de verdad mis ganas de querer, es como si en ese breve espacio de tiempo, de verdad hubiera roto mi corazón, es como si de verdad, me hubiera destroza. Quizás porque pensé que de verdad él no podía hacer daño, y porque de verdad me siento la única culpable, porque sigue habiendo dudas, y porque sigo esperando... Él es el último y sus recuerdos aún me arañan el alma, pero sin duda no es mi gran amor, es uno de tantos.
Ojala pudiera controlar mi vida, saber que quiero, que deseo, y dejar de hacer lo que se espera de mi. Esta noche solo soy una escrito frustrada al borde del abismo, la adolescente dolida y diferente...Pero... seamos realistas, ya nadie se suicida por amor, ya nadie tira la toalla, pero por la sencilla razón, de que ya nadie quiere, nadie siente, nadie se da de bruces contra el amor, como la primera vez, ni nadie pone empeño e ilusión sin importar la ostia que viene detrás.
Pero eso, siento que se acabó. Qué no me creo los te quieros, que me suenan a chiste las promesas, que rehuyo de todo...Pero los rumores, la gente habla, y ahí está. Y eso tampoco me ayuda, hoy es una noche en que han podido conmigo, en la que quiero despejarme y me veo encerrada en 4 paredes, mientras mi soledad se folla a mi dolor, mientras toman café la tristeza y la ira. Van de la mano la duda y los recuerdos...